Una de las cosas más hermosas de la vida es la familia, y es
que la familia aparte de ser algo bello es lo más duradero en tu vida. Pero me
refiero a tu familia de sangre, porque tu esposa puede algún día pasar a ser tu
"Ex-esposa", mientras que tus hijos nunca serán tus ex-hijos, y mucho
menos escucharas alguna vez alguien diciendo "Oye mira, allá va mi
ex-hermano".
Y es sobre eso que les quiero contar hoy; Los hermanos.
Como sabrán mis hijos (Sophia y Fabián) tienen 6 y 4 años
respectivamente y me he dado cuenta de que son eternos rivales, competidores
por naturaleza, contendientes habituales, oponentes dedicados, enemigo... no
mentira, no son enemigos jurados, es que no se me ocurrían más sinónimos.
El hecho es que están en la etapa en que por todo pelean; ya sea porque quieren
el mismo juguete, o mismo plato, o diferente parque, o el mismo asiento, o
simplemente porque no están de acuerdo en algo.
La verdad es que así son todos los hermanos del mundo:
pelean, se quieren, se extrañan, se cuidan. Y se aman, dan la vida por su
hermano.
Pero estadísticamente, la primera persona que te pone un da
un rasguño o te da un golpe en el estómago... es tu hermano. Y es que la pelea
entre hermanos es como las peleas de Dragón Ball... duran años. Y lo hacen en
todas partes; en la casa, luego en el automóvil, en el colegio, después los vas
a buscar y vuelven a pelear en el auto, en el supermercado, en la panadería, en
el parque, el ascensor, etc.
Creo que mis hijos siempre han peleado, pero quizás Fabián
(que es el menor) le tenía miedo a Sophia y allí terminaba la discusión. Pero
con el tiempo, Fabián empezó a defenderse y allí las cosas cambiaron. Ahora es
un “mano a mano”.
Expectativa (Batman y Robin)
Realidad (Batman y Joker)
La evolución de las peleas entre hermanos:
Al principio, cuando mis hijos se peleaban lo hacían frente
a nosotros y uno sabia quien había empezado y sabias a quien debías llamar la atención.
Pero se dieron cuenta y ahora se molestan de manera silenciosa, no te enteras
hasta que alguien grita o llora.
Luego se dieron cuenta que tiempo después, y sin importar quien comenzó, nosotros los regañábamos y castigábamos a ambos… así que empezaron a pelear de manera silenciosa en su cuarto, o en el cuarto de juguetes, o el baño o la cocina o algún otro sitio pero sin sonido. Y es que cuando están peleando a escondidas es como ver una lucha de la WWE pero en mute.
Luego se dieron cuenta que tiempo después, y sin importar quien comenzó, nosotros los regañábamos y castigábamos a ambos… así que empezaron a pelear de manera silenciosa en su cuarto, o en el cuarto de juguetes, o el baño o la cocina o algún otro sitio pero sin sonido. Y es que cuando están peleando a escondidas es como ver una lucha de la WWE pero en mute.
Entre las cosas más extraña que he visto es cuando se le
pasa la mano a uno de los hermanos y sabe que lo van a castigar pero antes de
entregarse a la justicia, trata de llegar a un acuerdo por fuera: “Ya, ya,
tranquilo, calma… si no lloras podremos ir todos al parque… y hasta te dejaré
ir en el lugar favorito del carro de Papá”. Y cuando eso no funciona, los niños
hacen lo que cualquier criminal hace… “esconde la evidencia”’. Y menos mal que
esconde la evidencia y no ENTIERRA la evidencia, y menos mal que vivo en
apartamento lejos de cualquier lugar donde enterrar al hermano.
Pero lo más gracioso es que después de la pelea, los niños siguen con su vida
como si nada:
- Oye y tú hermano Fabián?
- Vaya no sé.
- No sé de él desde el almuerzo y son las 6pm.
- Ni idea.
- Solo se debe regañar a quien llora. Por alguna razón mis hijos creen que debo regañar al que perdió la pelea, y es común escucharlos decir: “Oye Papá! Porque me regañas a mí? No ves que Sophia es quien está llorando por el golpe que le di?” o “Papá a mí no me regañes, Fabián es quien perdió”.
- Fabián le pidió a Sophia que leyera un cuento.
El cuento era de Disney y cuando estaba presentando a los personajes, Sophia
leyó “Tribilin” y Fabián se molestó porque ese era “Goofy” y Sophia solo decía que
eso no es lo que decía allí. Allí comenzó la pelea (estúpida traducciones).
Pero como ya lo he dicho antes, los hermanos siempre serán hermanos
y se cuidaran, y querrán a su manera. Y tendrán esa conexión tan fuerte y tan
indescriptible que nadie entiende.
Los hermanos pueden tener MIL diferencias; Gustos diferentes, personalidades diferente, géneros diferentes, le gustan cosas diferente, películas distintas, etc… pero cuando empiezas a buscar cosas parecidas, conseguirás otras MIL. Y después de un tiempo ya no sabrás qué diferencia hay entre tus hijos.
Los hermanos pueden tener MIL diferencias; Gustos diferentes, personalidades diferente, géneros diferentes, le gustan cosas diferente, películas distintas, etc… pero cuando empiezas a buscar cosas parecidas, conseguirás otras MIL. Y después de un tiempo ya no sabrás qué diferencia hay entre tus hijos.
De repente veras que algo que diferenciaba a uno de tus
hijos, fue adoptado por el hermanito y viceversa. O veras que ambos cambiaron simultáneamente
de gustos. Un día un hermano solo amara el chocolate y la hermana el de mantecado
pero un día, veras como ambos cambiaran de forma de pensar simultáneamente.
Quizás esas diferencias son las que hacen a los hermanos tan
unidos, quizás esos acuerdos locos para que no los regañen a ambos hacen una
fuerte unión. Quizás quejarse del trato de Papá o Mamá cuando los regañan hace
que se cuiden y amen de por vida.
Lo importante es que siempre serán… Hermanos.